La prodigiosa memoria de Dante

A pocos metros del Duomo de Florencia. En la Plaza delle Ballottole, se encuentra sobre la acera delante de un edificio una gran roca. Una placa recuerda que esta piedra seria el autentico "Sasso di Dante", es decir la roca sobre la cual el Divino Poeta se solía  parar y sentarse para descansar, pensar y observar la construcción de la Catedral.  El Sasso también está vinculado a una historia que tiene como protagonista Dante y su famosa memoria. Un día, mientras estaba absorto en sus pensamientos, sentado en la roca  como de costumbre, pasó un conocido,  este se acercó y le preguntó al poeta: "¿Oh Dante,  cual es la cosa que mas te gusta comer?" - "El huevo" - dijo Dante. Un año más tarde, la misma persona curiosa, volvía a pasar por el mismo punto y viendo a Dante todavía sentado en su lugar favorito y siempre absorto en sus pensamientos, se acercó sigilosamente  y quiso poner a prueba su prodigiosa memoria por lo que de nuevo le pregunto por la espalda-"Y con que?" - "Respondiendole Dante sin ni quiera mirarle, con una pizca de Sal!".

Otras fuentes en cambio acreditan que la anécdota tuvo lugar en una calle de Verona y no en Florencia.

Fuera como fuese seguramente nadie pone en duda la prodigiosa memoria del autor del mas celebre de todos los poemas.
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